El 7 de marzo de 2025, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró la implementación de aranceles equivalentes sobre los productos lácteos y de madera que llegan desde Canadá, como reacción a lo que describió como prácticas comerciales desleales por parte de la nación vecina. Trump argumentó que Canadá ha impuesto tarifas de hasta el 250% a estos productos originados en Estados Unidos, una situación que considera intolerable.
El 7 de marzo de 2025, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la imposición de aranceles recíprocos a productos lácteos y de madera provenientes de Canadá, en respuesta a lo que calificó como prácticas comerciales injustas por parte del país vecino. Según Trump, Canadá ha estado aplicando aranceles de hasta el 250% a estos productos estadounidenses, situación que considera inaceptable.
Las relaciones comerciales entre Estados Unidos y Canadá han estado caracterizadas por conflictos en varios sectores. La entrada de productos lácteos de EE.UU. al mercado canadiense ha sido objeto de disputa bajo el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (T-MEC). Washington ha afirmado que Ottawa no ha cumplido con sus compromisos, restringiendo el volumen de productos lácteos que pueden entrar al país sin aranceles. Aun así, a finales de 2023, un panel de resolución de disputas decidió a favor de Canadá en este caso.
En contraste, la controversia sobre la madera de construcción ha persistido por más de 35 años. Los productores de Estados Unidos acusan a sus pares canadienses de vender madera en el mercado internacional a precios por debajo del costo de producción, lo cual ha provocado tensiones en esa industria. Canadá se destaca como uno de los principales exportadores de madera para construcción a nivel mundial, teniendo en Estados Unidos su mercado más significativo.
Decisiones actuales y respuestas
Decisiones recientes y reacciones
A principios de febrero, Trump anunció la imposición de aranceles del 25% a todos los productos provenientes de Canadá y México, y del 10% a los hidrocarburos canadienses, acusando a ambos países de no hacer lo suficiente para combatir el tráfico de fentanilo, un potente opioide que ha provocado una grave crisis sanitaria en Estados Unidos. Inicialmente, se otorgó una exención temporal de un mes para dar margen a las negociaciones, pero los aranceles entraron en vigor el 4 de marzo.
Reacción de Canadá
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha manifestado su desaprobación respecto a las políticas arancelarias de Estados Unidos. Durante una conferencia de prensa, Trudeau afirmó que los canadienses se sienten ofendidos e indignados por estas acciones, y comunicó que impondrán un 25% de aranceles a productos estadounidenses como represalia. También señaló que se mantendrán las protestas simbólicas, como abuchear el himno de EE.UU. en eventos deportivos, para expresar su desacuerdo con las políticas adversas de Trump.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha expresado su descontento con las políticas arancelarias de Estados Unidos. En una rueda de prensa, Trudeau declaró que los canadienses se sienten insultados y enojados por estas medidas, y anunció la imposición de aranceles del 25% a productos estadounidenses en respuesta. Además, mencionó que continuarán las protestas simbólicas, como abuchear el himno estadounidense en eventos deportivos, para manifestar su desacuerdo con las políticas perjudiciales de Trump.
Expertos en economía alertan que la imposición de aranceles amplios podría impactar negativamente en el crecimiento económico de Estados Unidos y aumentar la inflación. Los consumidores estadounidenses podrían experimentar alzas en los precios de productos esenciales importados de Canadá, como frutas, verduras, cerveza, licores y equipos electrónicos. Asimismo, el precio de la madera canadiense, utilizada por numerosos constructores de viviendas en Estados Unidos, también podría subir, afectando al sector de la construcción.
Por otro lado, Canadá, una economía que depende mucho del comercio, podría enfrentar un crecimiento económico afectado y un aumento en los costos tanto para las empresas como para los consumidores. El primer ministro de Quebec, François Legault, ha advertido que las tarifas estadounidenses podrían resultar en la pérdida de hasta 100,000 empleos en Canadá. Además, las compañías canadienses que no puedan exportar sus productos a Estados Unidos en la misma cantidad podrían verse forzadas a disminuir su producción, despedir empleados o incluso cesar sus operaciones.
Expectativas a futuro
Perspectivas futuras
La situación actual refleja una escalada en las tensiones comerciales entre Estados Unidos y Canadá. Mientras Trump mantiene su postura de imponer aranceles para proteger a los productores estadounidenses, Canadá busca defender sus intereses y responder a las medidas consideradas injustas. La comunidad internacional observa con preocupación esta disputa, ya que podría tener repercusiones en la economía global y en las relaciones diplomáticas entre ambos países.
Es esencial que ambos gobiernos continúen el diálogo para encontrar soluciones que beneficien a ambas partes y eviten una guerra comercial prolongada que afecte a sus economías y a sus ciudadanos. La cooperación y el entendimiento mutuo serán clave para superar las diferencias y fortalecer las relaciones bilaterales en el futuro.